domingo, 2 de diciembre de 2007
sábado, 28 de julio de 2007
viernes, 27 de julio de 2007
Buenos Aires tiene tranvía.
Una nueva forma práctica, rápida, ecológica y pintoresca para transportarse en la bella ciudad de Buenos Aires.
martes, 24 de julio de 2007
Buenos Aires, el paraíso de las compras
Por Almudena Calatrava - EFE
Ayudados por la devaluación del peso los dueños de los negocios se benefician del continuo flujo de extranjeros
Exclusivos diseños de ropa, objetos decorativos de vanguardia, antigüedades, artesanías e insólitas ofertas conviven en el inmenso bazar en el que se ha
convertido Buenos Aires, donde un sinfín de comercios atrae como un imán a argentinos y foráneos.
Ayudados por la devaluación del peso –la moneda nacional argentina- en 2002, durante la peor crisis económica que se recuerda, los dueños de los negocios se benefician del continuo flujo de extranjeros que viaja a estas latitudes atraído por la variedad, calidad y buen precio de los artículos en venta.
Las tiendas se multiplican en casi todos los barrios de la ciudad, pero varias zonas se han erigido en una suerte de mercados especializados. Dependerá del ánimo o gusto del consumidor dirigirse a una u otra para buscar, por ejemplo, un antiguo teléfono de pared o un moderno sillón de cuero.
Sabedores de este buen momento, los vendedores procuran mantener abiertas las puertas de sus locales el mayor tiempo posible y aceptan elásticas formas de pago. Algunos grandes centros comerciales o “shoppings” abren hasta las 22 horas y las tiendas de los barrios, donde se concentra una población joven o extranjera generalmente más consumista, pueden llegar a estirar aún más su horario de atención,
CIRCUITO DE COMPRAS
En el sur de Buenos Aires está La Boca, una de las zonas más populares de la ciudad y puerto de
llegada de millones de inmigrantes europeos siglos atrás. Los turistas se convirtieron en objetivo de los comerciantes del barrio cuando el peso argentino dejó de valer lo mismo que el dólar estadounidense y los artículos en venta se abarataron.
Todos los fines de semana las pintorescas calles de La Boca se llenan de puestos de artesanías
gauchas, piedras semipreciosas, artículos de cuero, cerámicas y pinturas al óleo y a la acuarela.
Antiguas casas de chapa y madera del siglo XIX que antaño eran refugio de los empobrecidos emigrantes italianos son ahora pequeñas galerías comerciales donde se ofrecen, por ejemplo, bolsos de mano de mujer por el precio de 25 dólares.
Siguiendo el recorrido sureño de la ciudad, se llega a San Telmo, donde los anticuarios son los protagonistas indiscutibles, con una oferta variadísima de muebles, relojes y otros objetos decorativos mayoritariamente traídos de Europa. El estilo Luis XVI, el “art nouveau”, el “art decó” y otras tendencias de estilos se superponen en galerías especializadas.
Hay también postales inolvidables. Así, en un antiguo mercado cubierto del barrio, las frutas y verduras conviven con lámparas francesas, cabeceros de cama de 1.800, cocinas de leña y postales eróticas de principios del siglo pasado.
http://www.lilianaclauss.com.ar/images/vidriera.jpg
Ayudados por la devaluación del peso los dueños de los negocios se benefician del continuo flujo de extranjeros
Exclusivos diseños de ropa, objetos decorativos de vanguardia, antigüedades, artesanías e insólitas ofertas conviven en el inmenso bazar en el que se ha
convertido Buenos Aires, donde un sinfín de comercios atrae como un imán a argentinos y foráneos.Ayudados por la devaluación del peso –la moneda nacional argentina- en 2002, durante la peor crisis económica que se recuerda, los dueños de los negocios se benefician del continuo flujo de extranjeros que viaja a estas latitudes atraído por la variedad, calidad y buen precio de los artículos en venta.
Las tiendas se multiplican en casi todos los barrios de la ciudad, pero varias zonas se han erigido en una suerte de mercados especializados. Dependerá del ánimo o gusto del consumidor dirigirse a una u otra para buscar, por ejemplo, un antiguo teléfono de pared o un moderno sillón de cuero.
Sabedores de este buen momento, los vendedores procuran mantener abiertas las puertas de sus locales el mayor tiempo posible y aceptan elásticas formas de pago. Algunos grandes centros comerciales o “shoppings” abren hasta las 22 horas y las tiendas de los barrios, donde se concentra una población joven o extranjera generalmente más consumista, pueden llegar a estirar aún más su horario de atención,
CIRCUITO DE COMPRAS
En el sur de Buenos Aires está La Boca, una de las zonas más populares de la ciudad y puerto de
llegada de millones de inmigrantes europeos siglos atrás. Los turistas se convirtieron en objetivo de los comerciantes del barrio cuando el peso argentino dejó de valer lo mismo que el dólar estadounidense y los artículos en venta se abarataron.Todos los fines de semana las pintorescas calles de La Boca se llenan de puestos de artesanías
gauchas, piedras semipreciosas, artículos de cuero, cerámicas y pinturas al óleo y a la acuarela.Antiguas casas de chapa y madera del siglo XIX que antaño eran refugio de los empobrecidos emigrantes italianos son ahora pequeñas galerías comerciales donde se ofrecen, por ejemplo, bolsos de mano de mujer por el precio de 25 dólares.
Siguiendo el recorrido sureño de la ciudad, se llega a San Telmo, donde los anticuarios son los protagonistas indiscutibles, con una oferta variadísima de muebles, relojes y otros objetos decorativos mayoritariamente traídos de Europa. El estilo Luis XVI, el “art nouveau”, el “art decó” y otras tendencias de estilos se superponen en galerías especializadas.
Hay también postales inolvidables. Así, en un antiguo mercado cubierto del barrio, las frutas y verduras conviven con lámparas francesas, cabeceros de cama de 1.800, cocinas de leña y postales eróticas de principios del siglo pasado.
http://www.lilianaclauss.com.ar/images/vidriera.jpg
lunes, 23 de julio de 2007
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